viernes, 18 de mayo de 2012

Capítulo 33: La ciudad del viento


Chicago les recibe sin mucho estrés. Es bastante fácil orientarse y Jeremy, el primo de Elisabet, les ha dado muy buenas indicaciones para saber cómo llegar a su casa. En poco menos de una hora viajan desde el aeropuerto de O'Hare hasta la casa de Jeremy, un "estudio de estudiante" cerca de la universidad Columbia donde él estudia diseño. El piso es muy pequeño pero está muy bien decorado por las manos de un gran diseñador gráfico, así que es muy acogedor. Tiene una litera y le van a dejar unos colchones para que uno duerma en el suelo. Efectivamente, será Ethan. Caballerosidad ante todo.


Se sitúan y descansan un poco antes de ponerse en marcha para ir a hacer algunas compras para la semana. Jeremy les lleva en metro hasta un supermercado latino que no está en el centro pero dónde los precios son mucho más baratos. Es gracioso porque de repente parece que están haciendo la compra en el mismísimo Mexico. Nada mejor que celebrarlo comprando auténticas tortillas de maíz y preparando unos deliciosos tacos para la cena. Aunque esta vez caseros, cómo no. Después de cenar ven una película que han alquilado en el Seven Eleven y se van a dormir.

--------------------------------------

El segundo día se levantan sin prisa y después de desayunar tranquilamente pasan por la biblioteca pública de Chicago porque Jeremy tiene que escanear unos documentos y enviar unos correos. Uno de los lugares preferidos del primo de Elisabet es la 9ª planta del edificio. Cómo se puede apreciar en la foto es un sitio espectacular con vidrieras y cristaleras por doquier. Además casi nunca hay nadie y tiene WIFI gratis. Un remanso de paz para estudiar o trabajar. Además para alegría de nuestros protagonistas el día ha amencido muy soleado y con una temperatura súper agradable. Ideal para pasear por la ciudad.


Salen de la biblioteca y vuelven a casa ya que se les ha echado la hora de comer encima. Jeremy se lanza y cocina una estupenda tortilla de patatas que acomodan sobre unos buenos panes para hacer honor a San Isidro y recordar a los madrileños. Sólo les falta la pradera, pero con la tortilla tienen suficiente.  Mientras comen, dos amigos se pasan a saludar. Son dos chicos que estudian diseño con Jeremy y que también han acabado el curso. Después de charlar un rato deciden ir al MCA (Museum of Conteporary Art) que es gratis los martes.


A Elisabet lo del arte contemporáneo no acaba de encajarle del todo, pero como en general le gustan los museos, se lo pasa bien. A Ethan sí le hacen más gracia las rarezas que se pueden encontrar en estos sitios, así que disfrutan de la tarde y se despiden de sus amigos. Para cenar comen un poco de pollo a la plancha y ensalada. Algo ligerito. Les han invitado a una fiesta en el piso de uno de los chicos que han conocido, pero después de cenar se "aplatanan" un poco y no les apetece viajar en metro hasta el sitio. Además después de llegar a casa una tormenta veraniega ha visitado la ciudad del viento y ha refrescado la noche. Aprovechando que han comido tan sano, lo destrozan yendo a comprar un helado. Ya no llueve aunque "está fresquito el ambiente". Ven otra película y a dormir, que ya son horas.

----------------------------------

El miércoles tampoco se levantan muy temprano. Ethan se había puesto la alarma para salir a correr a las 9 am. Cri cri. A las 9 am suena el despertador y lo único que se mueve en la habitación es el brazo de Ethan para apagar el móvil. Sobre las 10 amanecen y después de desayunar Ethan se va a correr mientras Elisabet y Jeremy se quedan viendo algunas de las "pocas" fotos que han realizado durante su estancia en NYC. Cuantas más fotos hacen, más pereza le da a Ethan seleccionar algunas, retocarlas, etc... Pero no se puede parar de hacer fotos con la cantida de cosas increíbles que hay por aquí.

Mr E vuelve a casa tras quemar alguna caloría (aunque seguro que no tantas como están ingiriendo). Obviamente no han terminado de ver ni la mitad de las fotos pero se preparan para salir. No hay internet en el piso así que los chicos se van a la biblioteca para conectarse un rato. Elisabet se adelanta y pasea un rato por el Millenium Park donde se encuentra la famosa habichuela de Chicago (no es un cantante flamenco, es un monumento) y otras cosas guays. Se juntan para comer unos sandwiches y pasean un buen rato. La verdad es que el piso en el que están es pequeñito pero tiene una situación privilegiada en pleno centro. De hecho está en la misma calle que el Hilton, aunque a 500 metros.

 Esa mañana cuando han ido a la biblioteca Jeremy se ha encontrado con una amigo que es la segunda vez que veía en todo el semestre pero que le ha dicho que está trabajando en una pizzería y que les puede conseguir un 50% de descuento en todo. ¡Genial! Ya tienen plan para la cena. Pasan a ver el menú a la vuelta de casa y se decantan por una dish pizza, que es la especialidad de Chicago. Es una pizza normal pero el doble o triple de ancha. Una especie de quische + pizza. A la cena se sumará otro amigo de Jeremy llamado Tory. Este tailandés-americano también estudia diseño, aunque de interiores. No obstante su verdadera pasión es la cocina. Se dedica a hacer pasteles y cup-cakes siguiendo las receta por youtube. Un crack y además es muy simpático. Le ofrecen un asiento pero dice que prefiere sentarse en el suelo, que así lo suele hacer en su casa siempre. Ok.


Terminan de comerse la suculenta (y contundente) pizza de Chicago y deciden ver otra película. Tory ofrece su casa y como tiene una pantalla más grande acuerdan ir allí en bus. Hasta ahora las han visto en un monitor extra que tiene el primo de Miss E. Viajan en bus un par de paradas y llegan a la casa de Tory. Está un poco más metida en la zona de rascacielos. De hecho él vive en una planta 26 de 44. Oh my. El edificio de al lado tiene el doble de pisos. "Si queréis podemos subir a la piscina en la última planta por si queréis ver la vista" dice Tory sin darle ninguna importancia.

Gimnasio y piscina climatizada en la última planta del edificio. "Casi nunca sube nadie, sólo algunos abuelillos". Ethan no puede salir de su asombro... "Quiero vivir aquí y subir a nadar y al gimnasio cada día antes de ir a trabajar" piensa Mr E. Elisabet también está impresionada. Jeremy ya ha estado varias veces así que no está impresionado, pero sonríe viendo como sus primos flipan. Bajan a la casa de su anfitrión después de hacer varias fotos: "La casa está hecha un desastre porque he tenido una "Tea Party" antes de ir a cenar con vosotros. Disculpadme". ¿Desastre? Efectivamente si tener cuatro tazas de porcelana en el fregadero es un desastre, estamos de acuerdo. ¡Pero si parece una casa de revista! Las vistas también son increíbles desde su casa y efectivamente la pantalla es "algo" más grande. Lo que también es increíble es que es el mismo chico que hace un rato prefería sentarse en el suelo con total sencillez. Jamás habrían dicho en ese momento que vive en un sitio así.


Ven la película mientras, sin saber bien cuando ni como, Tory ha preparado unas cookies deliciosas que E&E acompañan con un vino blanco dulce. Aunque Tory tiene una nevera con 50 botellas de vino a temperatura perfecta les comenta que él no bebe vino pero se las regalan y las tiene ahí para sus amigos. Genial. Cuando acaba la película vuelven en metro a casa. Tampoco tienen nada que envidiar, será un piso más pequeño, pero con mucho cariño. Se duermen rápido y fresquitos. El sol ha seguido alumbrando aunque había una brisa deliciosa que hacía el paseo perfecto. La temperatura idóndea para caminar, caminar y caminar... ¿qué más se puede pedir?

1 comentario:

  1. ¡madre mía qué edificios! ¡y esa biblioteca!!! impresionante! ayyyy qué poco os queda! me encanta ver a Elisabet con su primo a tantos km. de España besoss!

    ResponderEliminar